El pasado 9 de octubre se dio por concluida la vendimia 2014 en Dehesa del Carrizal. Ha sido una muy buena campaña, con la uva recogida en su punto exacto de maduración y la producción que se había previsto.

Septiembre ha sido un mes irregular en el aspecto climático. En nuestra finca hizo bastante calor al principio del mes, lo que aceleró el proceso de maduración.

Después siguieron unos días más fríos, con un poco de lluvia y de nuevo volvieron días de sol, lo que permitió a la uva conseguir ese punto de madurez exacto que precisaba. En cuanto se hubo logrado ese punto, comenzamos a vendimiar las diferentes variedades.

En el crecimiento de la vid, durante la floración en el mes de junio, tuvimos en la finca un mes con algo de lluvia. Posteriormente el verano fue seco pero con temperaturas no muy calurosas, especialmente durante el mes de agosto, lo que produjo un lento proceso de maduración, muy beneficioso para nuestras variedades (Chardonnay, Syrah, Merlot, Cabernet Sauvignon, Tempranillo y Petit Verdot). Todas ellas han sido cosechadas en el punto óptimo de maduración, no destacando unas sobre otras en este sentido.

Tras la vendimia, los primeros parámetros analíticos realizados al fruto cosechado indican un equilibrio muy adecuado entre azúcar y acidez. La primera impresión es que será una añada con mucho equilibrio y elegancia, que producirá vinos para durar en el tiempo.

Ahora queda realizar un buen trabajo de bodega, pero la materia prima recogida ha sido de excelente calidad, lo que sin duda es un elemento fundamental para la elaboración de un gran vino.